En un mundo convulso y en permanente cambio, le toca el turno a la Educación. No hablamos de modelos educativos sino de un giro de este sector hacia la innovación. A estas alturas todos somos conscientes de la situación económica que atravesamos y es por ello que no sólo las empresas privadas buscan una reducción en sus costes y un aumento en su productividad. Muchas entidades públicas empiezan a tomar conciencia de ello y uno de los sectores que se está sumando a esta iniciativa, es el de la Educación, donde están creciendo el número de cursos en colegios y universidades que se imparten a través de videoconferencia. Esto ya está pasando en Estados Unidos.
Con el fin de atender a un número mayor de estudiantes, abaratando así los costes, los centros están mejorando sus capacidades de aprendizaje en línea. En el estado de Ohio, la matrícula de los cursos en línea es de hasta un 25% del total de cursos desde el año 2008. De hecho, según un estudio realizado por Wainhouse Research, existen casi 30 mil sistemas de videoconferencia en escuelas estadounidenses y departamentos de educación desde 2009.
Estas soluciones permiten a los educadores conectarse con los estudiantes a través de conexiones de alta definición. Los beneficios de este tipo de aulas son, entre otras, la de obtener un mayor acceso a estudiantes y expertos dispersos geográficamente, la reducción de gastos de viaje y mejor optimización del tiempo y la mejora del diálogo entre todos los participantes, comunicándose unos con otros en tiempo real y pudiendo compartir documentos.
Nosotros tenemos claro que el futuro inmediato pasa por la adopción de este tipo de herramientas que hacen que nuestro día a día sea más fácil. Durante el último año escuelas de idiomas y autoescuelas se están interesando por este tipo de servicios y algunas de ellas ya han contratado el servicio Oigaa Meeting.